Carlos Pérez Siquier

Con 174 fotografías, la Fundación Mapfre homenajea la carrera fotográfica del almeriense Carlos Pérez Siquier, a lo largo de sus 6 décadas de ejercicio. Casi con noventa años, Pérez Siquier continúa viviendo en su Almería natal, tierra que a pesar de estar fuera de los focos artísticos, nunca ha abandonado y donde ha captado su transformación en el papel fotográfico. Desde las primeras fotografías en blanco y negro de los años 1950 del barrio marginal de La Chanca, a las transformaciones del litoral mediterráneo pasando por el turismo masivo del Spain is different de los 1970, o incluso el reflejo de la sociedad de consumo. Pérez Siquier refleja en todas sus series el discurso social candente en cada época, con un toque de crítica mordaz matizada por una tratamiento colorista y sensual de las imágenes.

No dudó en abrazar el color en los años 1970, algo con lo que pocos en la época se atrevieron, dejó atrás el blanco y negro. El color le dio más impacto de cara a tomar el pulso al turismo de carnes al sol y al paisaje cambiante día a día en el litoral. En las décadas posteriores abandona la figura humana del espacio, con una visión muy contemporánea de la imagen, con fotografías de ambientes muy envolventes de carácter muy poéticos; sobretodo en sus últimos trabajos de 2015, La Briseña, donde la luz se hace más templada.

Pérez Siquier continúa teniendo una imagen muy contemporánea. Todavía conserva aquella mirada humana del joven empleado de banco que subía los fines de semana a La Chanca a fotografiar con uno o dos disparos esa cruda realidad, aunque siempre con un respeto por el personaje plasmado en la imagen. Son imágenes clásicas de las cuales Paraguas al sol forma parte de los fondos del MOMA de Nueva York.

De 14 de febrero al 17 de mayo 2020

Sala Fundación Mapfre - Casa Garriga Nogués

Diputación 250, Barcelona

Martes a sábado 10h a 20h, domingo 11h a 19h, lunes de 14h a 20h

www.fundacionmapfre.org

Previous
Previous

Premio Art Situacions 2020

Next
Next

Helena Rubistein, la colección de Madame