Ópera. Pasión, poder y política

El Victoria & Albert Museum de Londres, en colaboración con la Royal Opera House, ha concebido la exposición desde la Venecia Renacentista hasta los principios del Siglo XX para disfrute de los visitantes amantes de la ópera y para aquellos que todavía no se han iniciado en ella. Un recorrido donde la  ópera ejerce de hilo conductor para medir la intensidad cultural de las urbes europeas; para ello la muestra escoge 8 ciudades que a lo largo de 4 siglos supieron ser motores culturales.

La primera en aparecer es escena es la opulenta Venecia de 1622 con Monteverdi y su dueto de amor de Nerón y Poppea, ‘Pur ti miro’. Cada visitante realiza su andadura particular con unos auriculares que van cambiando de fragmento lírico al andar por los distintos ciudades-actos de la exposición.

La segunda en aparecer es Londres con Rinaldo de Händel. Era una ciudad vivaz que se abría al comercio y mostró su opulencia con decorados barrocos y ricos vestuarios que vistieron los Castrati que tanto furor causaban.

La noches de Figaro subió el telón de la Viena de la ilustración. En 1842 la Scala de Milán abre con el Nabucco de Verdi. En la ciudad de la Lombardia se vivía  el risorgimento italiano. Vean aquí la partitura original de Verdi.

La ópera de Paris recibe el Thanhauser de Wagner donde en plena época del Imperio de Napoleón III ya se pagaban 2000 francos por una anualidad de un palco.

Barcelona aparece con el estreno de Pepita Jiménez de Albéniz. El coliseo operístico del Liceu no quedó exento de esa Barcelona convulsa, cuando en 1893 el anarquista Santiago Salvador echó una bomba en el edificio con la muerte de una veintena de asistentes miembros de la burguesía catalana.

1905, la ciudad de Dresde pone en escena La Salomé de Strauss. Europa miraba atenta como se cocía el movimiento expresionista y cómo supo ser en aquella época un polo de atracción cultural para muchos artistas. Lucen los diseños de vestuario hechos por Salvador Dalí y un ropaje de Herodiade en seda negra de Gianni Versace.

Ya en 1934 San Petesburgo (en ese tiempo llamada Leningrado) se estrenó Lady Macbeth, censurada por la Rusia soviética. Stalin presente, se levantó y se fue en el último acto. Shostakówich sufrió en sus carnes el ostracismo del régimen.

CaixaForum Barcelona

Av. de Francesc Ferrer i Guàrdia , 6-8, Barcelona

Del 19 de septiembre 2019 al 26 de enero 2020

De lunes a domingo y festivos, de 10 a 20 h

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